El toldo es una gran idea aislar nuestro hogar de las intensas radiaciones solares y ahorrar en gasto de aire acondicionado y ventiladores en verano. Pero durante el resto de estaciones del año, en las que el toldo está recogido o plegado, vemos como las estructuras metálicas y las lonas sufren con las inclemencias climatológicas.
Por esta razón, a continuación os vamos a dar unos sencillos consejos sobre los cuidados básicos del toldo para que mantengas los tuyos como el primer día:
- Asegúrate de que está bien recogido si hay lluvia, nieve o viento.
- No lo enrolles si está mojado, a menos que sea imprescindible. Ábrelo de nuevo en cuanto sea posible para que se seque.
- Límpialo de hojas, insectos y basura en general, lo antes posible.
- Cuando la lona esté sucia, pásale un cepillo suave. Utiliza jabones neutros, nunca abrasivos (como lejía).
- Para las partes metálicas (como aluminio) conviene utilizar productos específicos.
Resulta muy importante que nunca se fuerce el toldo al abrirlo o cerrarlo, y si se resiste, lo primero que hay que hacer es comprobar que no hay ningún obstáculo.
Y por último recuerda: una revisión profesional periódica multiplicará la vida del toldo. En Toldo Ibérica estamos a vuestro servicio para cualquier duda o consulta que tengáis.